Pedro II (El Romano)

Pedro II (El Romano)De Wikipedia, la enciclopedia libre


Saltar a: navegación, búsqueda Pedro II, Pedro Romano o Pedro El Romano es el supuesto nombre que adoptará el último papa, según algunas interpretaciones de las conocidas como Profecías de San Malaquías. Muchos católicos dan crédito a dichas profecías[cita requerida], de ahí su relevancia y popularidad. Según las mismas, el último papa sería conocido como Pedro El Romano, tratándose del segundo pontífice en llevar este nombre después del primero de todos, que fue San Pedro. Este personaje aparece relacionado con el fin del mundo y la segunda venida de Cristo.

Índice [ocultar]
1 El lema
2 Distintas interpretaciones
3 Referencias
4 Véase también[editar] El lema

A este papa le corresponde el último lema que, extrañamente, Malaquías no enumeró como a los otros 111 papas anteriores. Su lema es el más extenso, detallado y descriptivo, indicando ello que el supuesto último papado no sería igual a ninguno de los anteriores y que se enfrentaría a eventos extraordinarios no sucedidos desde los inicios de la iglesia. Malaquías indica en el lema que la iglesia volvería a ser perseguida como en los tiempos de los emperadores romanos.
 El lema expresa:
"In persecutione extrema S.R.E. sedebit. Petrus Romanus,
qui pascet oues in multis tribulationibus: quibus transactis ciuitas septicollis diruetur,
& Judex tremedus iudicabit populum suum."
Finis.

En castellano, el lema expresa:
"Durante la persecución final de la Santa Iglesia de Roma reinará Pedro el Romano, quien apacentará a su rebaño entre muchas tribulaciones, tras lo cual, la ciudad de las siete colinas será destruida y el Juez Terrible juzgará al pueblo."
Fin

[editar] Distintas interpretacionesNo faltan quienes dudan de la autenticidad de las profecías. Asimismo, entre los que sí dan crédito a las mismas, existen múltiples interpretaciones sobre este supuesto último papa.
Sobre la destrucción del la ciudad de siete colinas se ha pensando desde la destrucción de la ciudad de Roma hasta la destrucción física y doctrinal del Vaticano y con él el fin mismo de la Iglesia Católica.
Una segunda interpretación afirma que Pedro II (El Romano) decidiría cambiar la sede del papado de Roma a Jerusalén, por ser esta ciudad cuna de la fe cristiana.[1]
Se han comparado las Profecías de San Malaquías con otras supuestas profecías. En 1914, al agonizar, el papa Pío X supuestamente expresó: He visto a uno de mis sucesores de igual nombre, huyendo entre los cadáveres de sus hermanos. Se refugiará de incógnito en alguna parte, y después de un breve respiro, morirá de muerte cruel.[2]
Existe una teoría según la cual Pedro Romano sería Tarcisio Bertone, actual secretario de Estado del Vaticano, cuyo segundo nombre es Pietro (Pedro en italiano) y nació en la localidad de Romano Canavese.[3]



Comentarios